La sostenibilidad, eje imprescindible para la competitividad, tema central del encuentro anual de AIN
Alberto Andreu, presidente de Dirse, y las compañías Exkal, ROCKWOOL y Schneider-Electric fueron las protagonistas de este encuentro que reunió a cerca de 150 empresarios y directivos de la Comunidad foral
Sin sostenibilidad no existirá la competitividad. Este fue el mensaje principal del encuentro anual de la Asociación de la Industria Navarra (AIN) celebrado esta mañana bajo el lema ‘Sostenibilidad en acción’, y al que acudieron cerca de 150 directivos y empresarios de todos los sectores. “O la empresa es sostenible o no será”, señaló en la apertura José Juste, presidente de AIN, institución referente en la Comunidad foral en ayudar a empresas y organizaciones de cualquier tamaño en avanzar en su transición ecológica.
Ana Ursúa, directora general de AIN, explicó que las nuevas directivas europeas quieren evitar lo que se conoce como SDG-washing, término que se refiere al uso de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) sin demostrar su cumplimiento real. “Por eso, el nuevo marco legal establece la necesidad de que las organizaciones demuestren a partir del próximo año de manera concreta y con una serie de indicadores, de qué manera contribuyen a la mejora social, ambiental y económica. Los ODS no han de ser una herramienta de marketing. En el caso de las pymes constituyen un gran primer paso para recabar información de partida y también para establecer acciones concretas en las empresas, especialmente para aquellas que no van a estar obligadas a reportar bajo la nueva directa y sus estándares. AIN es el agente facilitador que impulsa la competitividad de manera sostenible”.
Alberto Andreu, (Madrid, 1963) Doctor cum laude en Economía y Empresa (Universidad Pontificia Comillas), MBA (IE Business School) y Licenciado en Derecho (Universidad Pontificia de Comillas ICAI_ICADE), consultor, profesor del IESE y presidente de la Asociación Española de Directivos de Sostenibilidad (Dirse), referente nacional e internacional dentro de la RSC, impartió la conferencia ‘Sostenibilidad, mucho más que una moda, una disrupción’. Alberto Andreu, que participó en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Desarrollo Sostenible, celebrada en Río de Janeiro en 2012, lugar donde se gestaron los ODS, expuso el marco conceptual con los diferentes ejes a los que concierne la sostenibilidad: el económico, el medioambiental y la gobernanza.
Andreu, senior Advisor de EY y Atrevía, y asesor de los Consejos de Administración de la Corporación Pascual y Cosentino, relató la batalla que se ha producido en los últimos 70 años para clarificar el concepto de la sostenibilidad: “Este término va más allá de la parte ambiental. También está relacionado con la gestión de riesgos y oportunidades en la parte social y económica”. Además de este debate, en las últimas décadas también se ha producido otro debate por equiparar la información financiera con la no financiera que, desde 2023 será obligatoria para las grandes empresas. Deberán cuantificar qué parte su opex, su capex y su ebitda es sostenible.
En opinión de Alberto Andreu, la Ley de Cambio Climático que fomenta un cambio de modelo económico basado en las energías fósiles a otro sostenible va a suponer una disrupción de nuestra economía incluso mayor que la transformación digital: “La consultora McKinsey ha cuantificado en 9,2 trillones de euros al año la inversión necesaria para que se produzca este cambio”.
Referente en sostenibilidad
Alberto Andreu moderó una mesa redonda que tuvo como protagonistas a Alfonso Antoñanzas, fundador de Exkal, con sede en Marcilla y dedicada al diseño y fabricación de muebles frigoríficos para la gran distribución; Santiago Osés, director de planta de Rockwool, ubicada en Caparroso y centrada en la fabricación de lana de roca y Raquel Gascó, directora de planta de Schneider Electric, en Puente la Reina.
Santiago Osés, de ROCKWOOL, explicó que la sostenibilidad es uno de los principales pilares de la estrategia de la empresa, que se centra en convertir los retos de desarrollo sostenible en oportunidades de negocio a través de productos y servicios innovadores. “Aunque somos una empresa intensiva en energía, los productos que fabricamos contribuyen a un enorme ahorro energético. Podemos decir que, durante la vida útil de su uso, el aislamiento de edificios ROCKWOOL vendido, ahorra más de 100 veces el carbono emitido en su producción”. Santiago Osés, además, desgranó tres de los proyectos en los que se encuentran inmersos para avanzar en la sostenibilidad de su planta de Caparroso. En el marco de la economía circular, han puesto en marcha el Servicio de clasificación y reciclaje de residuos de aislamiento en obra ROCKCYCLE, siendo el primer fabricante en España que lo implementa y que consigue convertir en nuevos productos los residuos de lana de roca; en el ámbito de la eficiencia energética, convertirán la parte de oficinas de administración y logística en edificios de consumo nulo o casi nulo, así como la generación de electricidad por un sistema ORC de aprovechamiento del calor residual del horno de fusión y, por último, en el ámbito de la tecnología, van a introducir mejoras pasando el actual sistema de fusión a una tecnología en base eléctrica y verde.
Otro ejemplo de buenas prácticas en materia de sostenibilidad es Exkal, empresa también asociada a AIN, que ha trabajado durante la última década en demostrar que toda su actividad es sostenible: “Hemos conseguido reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 60% y que el cliente obtenga un retorno de la inversión en tres años. Nuestro discurso ha sido tan disruptivo que nos hemos visto obligados a certificarlo para darle fiabilidad”, explicó Alfonso Antoñanzas, fundador de la empresa que relató que incluso sin existir la obligación legal, Exkal ha venido certificando de manera voluntaria tanto su actividad financiera como no financiera. “En España apenas existen una veintena de compañías que hayan certificado su sistema de Responsabilidad Social Empresarial. Nosotros, en 2011, fuimos los terceros”.
Raquel Gascó, directora de la planta “Smart Factory” de Schneider Electric, en Puente la Reina, y que inauguró a principios de año la primera microgrid industrial de España, puesta en marcha junto con Acciona, explicó el compromiso que mantiene la empresa que dirige con los ejes de la confianza, la equidad, las generaciones futuras y, sobre todo, con su entorno local. “Schneider Electric está desarrollando una muy interesante labor como proveedor de programas a medida para descarbonizar empresas tan importantes como Mango, Inditex, Roca, Walmart, PepsiCo, o las diez principales farmacéuticas a través de servicios como la asesoría de compra de energía. Además, ofrecemos numerosas soluciones digitales de gestión de la energía que no sólo comercializamos, sino que utilizamos en nuestras fábricas, como la microgrid entre ellas. Nuestro compromiso y todas las acciones que estamos realizando harán que consigamos ser neutros en carbono en 2025, emisiones 0 en 2030 y neutros en toda nuestra cadena de suministro para 2040”.
En la clausura del encuentro, la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite, citó el nuvo Plan Industrial de Navarra, que ha estado en exposición pública recientemente: “Este plan pretende contribuir a que la industria, una de nuestras fortalezas económicas y sociales, siga creciendo en su peso en el PIB y pueda alcanzar el 32% en el horizonte 2025. Este plan tiene que reforzar el liderazgo de la industria como motor no solo económico sino también de esos objetivos de desarrollo sostenibles y que tenemos como referente toda la sociedad en su conjunto”.
La presidenta, también aludió al actual contexto económico, marcado por la inflación y los problemas en la cadena de suministros: “La fortaleza de nuestra industria está hasta el momento permitiendo resistir estos embates inflacionistas y de problemas de suministro. Unida esa fortaleza a las medidas que los gobiernos estamos tomando para tratar de paliar en lo posible el impacto al tiempo que acompañamos las transformaciones que contribuirán a que seamos menos dependientes energéticamente y también en lo que se refiere a materias primas y determinados componentes”.
En crecimiento
En un contexto marcado por la incertidumbre, AIN continuó creciendo tanto en número de empresas asociadas, como en facturación y empleo. En concreto, cerró 2021 con un total de 121 empresas asociadas que, en su conjunto, representan más del 40% de facturación de toda la industria de Navarra. En cuanto a la facturación, superó los 7,4 millones de euros gracias a su actividad para empresas, lo que permitió aumentar su plantilla hasta las 104 personas e incorporar talento altamente cualificado para seguir respondiendo a los retos de la industria.
